El ibón de Iserías, también conocido como ibón de Samán, es uno de esos rincones poco conocidos del Pirineo aragonés que sorprenden por su belleza y tranquilidad. Esta ruta parte desde el histórico Coll de los Ladrones, al que se accede por una pista de grava desde Canfranc Estación. El inicio de la pista está justo a la salida del pueblo, en dirección a Candanchú, cruzando un puente a mano derecha. En temporada alta, a partir del 30 de junio, el acceso por vehículo está restringido, por lo que conviene informarse antes. Si accedemos en temporada alta tendremos que dejar el coche en el parking marcada en color verde en el mapa y tendremos que añadir 2 km más a la ruta.

Desde el collado, comenzamos el ascenso por una senda bien marcada que nos lleva por un paisaje típico de alta montaña.

El primer tramo de la ruta discurre por un agradable sendero entre bosque, envuelto en sombra y frescor. Poco a poco, la vegetación se abre paso a un paisaje más abierto, donde el terreno se vuelve pedregoso y la pendiente se acentúa. Al superar este tramo, el esfuerzo se ve recompensado con la entrada al espectacular valle de Izas, un paraíso de praderas verdes rodeado de crestas que impresionan. Cruzamos el valle en dirección a la cascada y, poco antes de alcanzarla, un gran bloque de piedra marca el desvío a nuestra derecha hacia el ibón. Desde ese punto, el sendero gana altura de nuevo y el entorno se vuelve más salvaje, rocoso y auténticamente pirenaico.

Tras algo más de 6 kilómetros de ascenso, llegamos al Ibón de Iserías, situado a más de 2190 metros de altitud. Este pequeño lago de origen glaciar se encuentra rodeado de crestas y praderas, y ofrece un entorno silencioso y apartado ideal para descansar, hacer un picnic o simplemente contemplar la naturaleza. Si se realiza en días despejados, el reflejo de las montañas en el agua crea una imagen de postal.

La ruta de ida y vuelta suma unos 12,8 kilómetros y es ideal para senderistas con algo de experiencia. Una opción excelente para descubrir uno de los secretos mejor guardados del Valle del Aragón.